Esta fabulilla,
salga bien o mal,
me ha ocurrido ahora
por casualidad.
Cerca de unos prados
que hay en mi lugar, pasabaun borrico
por casualidad.
Una flauta en ellos halló, que un zagal se dejóolvidada
por casualidad.
Acercóse a olerla
el dicho animal,
y dio un resoplido
por casualidad.
En la flauta el aire
se hubo de colar,
y sonóla flauta
por casualidad.
“¡Oh!”, dijo el borrico;
“¡Qué bien sé tocar!
¡Y dirán que es mala
la música asnal!”
Sin reglas de arte,
borriquitos hay
que unavez aciertan
por casualidad.